¿Zombi o pechuga?

Los zombis ya no son lo que eran. Eso sí, siguen siendo criaturas que una vez fueron personas y que ahora, por culpa de un descuido vagan a sus anchas por a lo largo de la ciudad en busca de carne fresca. Los zombis de antaño siempre habían sido unos seres torpes, gruñones y bastante "Carpantas". Los zombis de siglo XXI son mucho más evolucionados, se han transformado en seres rápidos, semejantes a guepardos putrefactos, incluso denotan un ápice de inteligencia. Es natural, renovarse o "morir". La "vida" de un zombi clásico peligraba enormemente. Los zombis de antes no controlaban el grado de descomposición, su cuerpo estaba muerto por lo que se deterioraba y se corrompía con facilidad sin que ellos hiciesen algo por evitarlo. Los de ahora están hecho con otra pasta. Tardan más en descomponerse aunque tal evento no puedan evitarlo pero aprovechan muy bien el tiempo antes de que les llegue su fecha de caducidad. Otro factor que les diferencia es el de los recursos. Los zombis actuales aunque sean salvajes saben mesurar su apetito voraz. Comen partes y se preocupan por no dejar que su victima se convierta en uno de ellos. Son conscientes que si se les acaban los humanos y se incrementa el numero de muertos vivientes al final no hay nadie más a quien comer y por lo tanto pueden acabar muriéndose de hambre y, de momento, lo de tocar la carne corrompida de sus semejantes como que no les hace mucha gracia. Los zombis de antes vagaban a sus anchas, iban en pequeños grupos y estaba muy mal organizados. Los de hora van en legión, aporrean puertas y ventanas al unísono y entran donde creen que hay comida como un torrente pestilente y sin compasión. Su punto débil sigue siendo el mismo: La cabeza. Ya les puedes disparar en el pecho, los brazos, el costado o las piernas, ellos seguirán poniéndose en píe (o yendo a rastras) con tal de darse un buen festín. Dialogar no sirve con ellos. Tratar de domesticarlos tampoco. Un humano simplemente debe poner su pellejo a salvo, convertirse en carnaza o en zombi, si es que le dejan.