sábado, marzo 01, 2008

Sentido del humor.

No es la primera vez, ni será la última, que me han comentado acerca de lo dramático que me pongo a veces en este blog (Bueno también me comentan “A ver si pones más párrafos mamón y no ese mazacote de texto que agota hasta a un ratón de biblioteca”) Quienes me conocen saben que mi carácter está como a mil años luz de lo que realmente aparenta representar en este blog. No es que no sea yo. Todo lo contrario. El Richard de este blog es otro punto de vista de mi propio yo (¡toma castaña!), una parte de mí que me ha tocado trabajar en esta vida supongo con alguna intención determinada. Vete a saber tú, cosas muy raras tiene a veces el Karma.

Vamos a ver, soy muy consciente que la vida se ha de tomar con humor. Eso sí, no reírse de ella, sino con ella. Entre otras cosas ayuda a que ésta no te de palos más fuertes e inesperados. Sin embargo a veces cuando escribo me siento en la obligación de ser dramático. Y es que la situación la pone a huevo. También es cierto que a veces podría enfocarlo desde otro punto de vista pero cuando uno está inmerso dentro de la trama (y hay que reconocer que la mía es de órdago) es muy difícil hacer tripas corazón y no dejarse influenciar por el estado de ánimo. Sé que debería ser menos agresivo con según quien ¿Pero se puede ser menos condescendiente con alguien que ha cometido verdaderas atrocidades con tus seres más queridos? Supongo que sí. Pero sería como beber un vino barato o subirse a una montaña rusa cutre carente de emoción. No sería yo mismo, sino una versión light de un Richard autocensurado por tratar de ser políticamente correcto. Y no soy así. Cada día menos.

Sé que he hecho llorar a mucha gente que ha leído este blog o ha escuchado los acontecimientos de mi boca y en persona. Pero me consta que también hay quien se lo ha pasado muy bien y se ha reído de lo lindo. Ojo, no me refiero a que se haya choteado de lo que nos está sucediendo, sino a que se lo ha pasado en grande con post con algo de menos carga dramática como por ejemplo el titulado: “El Día que Charles Bronson me regaló su Culo”.

4 comentarios:

flor de te dijo...

Ets un pel.la!!! Jo em ric molt amb tu perquè ja saps que som la pareja de...l humolllllllllll!!!. besitus

Barry Gon dijo...

hijo, Richardito!
que blos ma internasiona!
hasta te responden en hapone!!

o e camboyano?

SisterBoy dijo...

Llorar no pero reconozco que me he angustiado bastante leyendo el blog

Barry Gon dijo...

llorar, llorar, tampoco, pero me he indignado, he sufrido la impotencia, el deseo de ir a partirle las piernas a alguien, la necesidad de acercarme y abofetear a otros y es gracias a capitulos como el de charles bronson que podia y puedo comprobar que la salud mental del autoe sigue intacta, y eso es muy importante, dada la tarea que tiene por delante