Hacía tiempo que quería escribir. Es decir, hacerlo siendo yo mismo, sin estar pendiente de una fecha de entrega o a cambio de un talón. Creo que ya va siendo hora de armarme de valor, de entrar en el caserón, de abrir ventanas y puertas y permitir que la luz invada su interior. Necesito dar forma a los fantasmas, atraparlos, enfrentarme a ellos y asumir que, en el fondo, también forman parte de mi vida.
lunes, enero 15, 2007
Comprando a golpe de ratón
Un menda, comprador compulsivo reconocido, no puede estar tranquilo ni en su propia casa. ¿Qué sucede si tienes dinero, son rebajas y procuras por todos los medios no hacer gasto alguno encerrándote en tu casa? Pues que existe Internet una tienda abierta las 24 horas con luces de neón tan atractivas como hipnótico, un lugar lleno de gangas y precios llamativos a la espera de que cualquier incauto caiga bajo su poderoso influjo. Lo admito yo ya lo he hecho. Un lugar llamado Amazon (harto conocido por muchos de vosotros) me ha seducido, me atrapado y me amordazado. Claro, en primer lugar uno siempre siente curiosidad por lo que se cuece en otras partes del planeta, sobre todo en cuanto ediciones en DVD se refiere y, pequeñuelos y pequeñuelas, los EEUU son el paraíso de los precios, las ediciones especiales y raras y vete a saber qué otras cosas apetitosas más. Comprar por Internet es tan fácil como freírse un huevo o sonarse los mocos. Uno entra en la web, busca, analiza, hace un simple clic sobre el producto y ¡Voila! ya lo tenemos dispuesto para poder pagarlo. Con una simple tarjeta de crédito o debito es más que suficiente. Eso sí, los costes de envío se acoplan al final de la compra y, en una semana (más o menos), lo tenemos en casa. Hay quien compra series y películas sin subtítulos o audio en español (digo en español porque se trata de un tono neutro, con muchos dejes mexicanos que a muchos causa cierto rechazo) y, diccionario en mano es capaz de aprender el idioma más complejo del mundo con tal de disfrutar de su película favorita. En mi caso, prefiero los subtítulos en nuestra lengua y eso que he sido tentado por varios y suculentos packs que desconocen el castellano. Otra cosa descubierta dentro de Amazon (por ejemplo) es la posibilidad de comprar de segunda mano. Es decir a precios aun más irrisorios que el original. Eso sí, puedes correr el riesgo de hacer una compra y que ésta venga descalabrada, con la caja hecha polvo o los discos bailando samba en su interior. Pero de momento, lo que me ha ido llegando en dicha modalidad está muy por encima de la media. A ver, algunos packs se nota que han sido usados, pero si no eres muy tiquismiquis hasta te alegras de la compra. ¿Pero son todo son gangas o chollos? Depende. Si es cierto que puedes conseguir títulos inéditos o descatalogados y que los precios son muy apetecibles. Pero hay que tener en cuenta los portes y la forma de envío. Normalmente lugares como Amazon llegan a saltarse los portes extra de las aduanas que incrementan hasta un 16% en IVA sobre el precio pagado. Pero hay otras webs de compras que no lo avisan y lo que podría ser una desagradable sorpresa para muchos de magnitudes morrocotudas. Y es que siempre hay que leerse la letra pequeña.
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2 comentarios:
Yo podría vivir dentro de la web de Amazon :-)
A qué siiii... Amazon son the best of the beast.
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